Laura y David, son una pareja encantadora que provoca que todo a su alrededor se vuelva extraordinario, se decidieron por realizar el reportaje de boda de lo más completo, desde preboda, postboda e incluyendo nuestra experiencia en vídeo.
Como la boda era en Noviembre, hicimos su preboda a principios de Octubre, eligieron como destino las hermosas Fragas do Eume. Comenzamos con una serie de fotos más familiares junto a su pequeña y una vez Morfeo hizo su presencia, pasamos a realizar diferentes instantáneas ya propias de una preboda, exprimiendo cada imagen para sacar la esencia de cada uno de ellos.
Otro sábado más salimos de Cambre esta vez rumbo a Pontedeume para hacer los preparativos del novio, allí nos recibió el hermano de David y comenzamos a realizar los detalles y complementos del novio. La habitación con su gran cristalera nos ofreció una fuente de luz maravillosa para desempeñar nuestro trabajo, al poco apareció David ya con el pelo listo de peluquería para comenzar a prepararse, como ayudante, contó con su hermano con el que intercambió varias risas durante el proceso.
Con David ya listo, nos fuimos hacia el Pazo de Santirso (Abegondo – A Coruña), dónde Laura se encontraba en su momento de peluquería y maquillaje, aprovechamos esos minutos para comenzar con sus detalles, así como para ir analizando la colocación que tendríamos durante la ceremonia, la cual se celebraba el patio interior del pazo.
Los invitados fueron llegando, la hora de la ceremonia se acercaba y David ya los recibía antes del gran momento. Una vez Laura finalizó su maquillaje, comenzamos a capturar y grabar los momentos de complicidad con su hermana y su madre, mientras su pequeña correteaba con sus primas ya vestidas para la gran ocasión. Una vez lista, la esperaba su elegante padre para llevarla hasta el altar.
Todo listo, los invitados acomodados y con el alcalde de Pontedeume como maestro de ceremonias empezó a sonar la música en directo, entonces David apareció caminando tranquilamente del brazo de su madre a la que le dedicó unas tiernas miradas durante el pasillo. Una vez situado en el altar, cogió aire y dirigió su mirada hacia la esperada llegada de Laura.
De nuevo la música en directo inundó el ambiente, la pequeña de ambos y sus primas comenzaron a caminar, mientras Laura hacía lo propio justo detrás de ellas, agarrada fuertemente del brazo de su padre y visiblemente emocionada.
La pequeña en cuanto vio su papá comenzó a corretear hacia sus brazos, regalándonos uno de los instantes más espontáneos del día. Una vez los 3 en el altar, el alcalde de Pontedeume comenzó la ceremonia civil, dando paso a los discursos de los hermanos de Laura, las sonrisas, pero también las miradas vidriosas de la emoción contenida empezaron a surgir. Llegó el turno de los amigos de David con un discurso más distendido llenaron de diversión el ambiente, una buena dosis de risas para calmar los nervios previos al intercambio de anillos.
Tras leer la parte legal, el alcalde de Pontedeume realizó la gran pregunta a cada uno de ellos, respondiendo éstos afirmativamente el ya legendario “Sí, quiero” y pasando a colocarse los anillos en el dedo anular de la mano derecha donde permanecerán como símbolo de su amor. Acto seguido los recién casados sellaron con un beso su unión y se dirigieron con una bella sonrisa dibujada en sus rostros hacia sus invitados que fueron los causantes de la lluvia de arroz que allí se vivió.
En esta ocasión el catering era obra del equipo de Josmaga, que cuidó todo lujo de detalles, ayudando en todo momento a nuestra pareja. Una vez ya en los aperitivos, Laura y David fueron saludando a todos sus invitados, sus amigas sorprendieron a Laura en más de una ocasión, primero como detalle les regalaron un cuadro con historia propia y a mayores se vivió el divertido momento “zapatillas de plumas a todo color” las risas de nuevo fueron las reinas del ambiente.
Una vez en el comedor, Dj Dani fue el encargado de poner a sonar “Love Natural” de Crystal Fighters que puso todo el mundo arriba para recibir a Laura y David acompañados de su pequeña. La locura se desató, el ambiente animado perduró durante la comida y posterior entrega de detalles por parte de los novios tanto a padres, madres como abuelas, cumpleañeras, etc.
Con todo preparado para el baile, Laura y David comenzaron a danzar y el fuego frío de Dj Dani iluminó toda la escena quedando así unas imágenes de cuento. Acto seguido Laura bailó con su padre con una coreografía que no dejó indiferente a nadie y empezaron juntos a animar al resto de invitados para que se uniesen a la gran fiesta que posteriormente allí se vivió. Fue todo un acierto contar con Dj Dani como conductor musical, su destreza leyendo la pista y haciendo mezclas tan sutiles y exquisitas hicieron que todo el mundo disfrutara y enloqueciera con la música.
La sesión postboda se retrasó hasta mediados de año debido al mal tiempo que sufrimos los habitantes de la provincia de A Coruña. Una vez la climatología gallega nos dio un respiro, concretamos su sesión fotográfica y videográfica.
En esta ocasión los lugares elegidos por la pareja fueron el Castillo de Andrade, también conocido como Castillo de Noguerosa, situado a 309m sobre el nivel del mar en la cima de la Peña Leboreira, un monumento con mucha historia que observa desde lo alto la majestuosa villa de Pontedeume y como segunda localización, continuamos en tierras eumesas teniendo como escenario para las fotografías de postboda y el vídeo de boda el enigmático arenal de Centroña (Pontedeume).
Aquella tarde de postboda, las nubes y claros predominaban en el ambiente, por lo que la luz era muy variante, tanto entraban los rayos de sol para darle esa calidez, intensidad de color y alegría a las fotografías y al vídeo como de repente, se nublaba y las nubes te brindaban todo un dramatismo magnífico de ser retratado.
Después de unas cuantas fotografías y planos de dron interesantes por la zona del Castillo de Andrade, nos pusimos en marcha para aprovechar esa cautivadora luz del atardecer ya en la playa de Centroña, ahí el sol hizo su aparición nuevamente llenando de tonos cálidos todo el entorno. Con todos los permisos para el vuelo del dron, comenzamos a realizar el resto de clips de postboda capturando al mismo tiempo diferentes fotografías, algunas más de estilo romántico en la zona de las rocas, otras más naturales de momentos que surgen en cada sesión y del que, un fotógrafo o videógrafo de bodas, tiene que estar siempre alerta para inmortalizar ese instante que nace del mero hecho de encontrarse a gusto durante la sesión.